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¿Qué es el trastorno de conducta?

El trastorno de conducta (TC) es un trastorno de salud mental caracterizado por un patrón persistente de comportamientos agresivos, desafiantes y antisociales que violan los derechos de los demás o las normas sociales. Los niños y adolescentes con TC pueden mostrar una amplia gama de comportamientos perturbadores, como:

  • Agresión física hacia personas o animales, incluyendo intimidación, peleas y crueldad.
  • Destrucción de la propiedad, como vandalismo o incendios provocados.
  • Engaño o robo, incluyendo la mentira, el hurto en tiendas o el allanamiento de morada.
  • Las infracciones graves de las normas incluyen el absentismo escolar, escaparse de casa o quedarse fuera hasta tarde sin permiso.

Estos comportamientos no son sólo lapsus ocasionales de juicio o travesuras típicas de la infancia; son más graves y persistentes. El trastorno de conducta puede provocar un deterioro clínicamente significativo del funcionamiento social, académico y/o laboral. Si no se trata, puede persistir en la edad adulta, pudiendo desembocar en un trastorno antisocial de la personalidad u otros problemas legales y sociales.

Causas del trastorno de conducta

Se cree que la causa del trastorno de conducta es multifactorial e implica factores genéticos, ambientales y psicológicos. Los antecedentes de maltrato infantil, la disfunción familiar y la exposición a la violencia son factores de riesgo clave que aumentan la probabilidad de desarrollar un TC. Además, las cuestiones neurológicas, como los problemas en el lóbulo frontal del cerebro, responsable del control de los impulsos y del juicio, pueden contribuir al trastorno.

Consecuencias del trastorno de conducta

Las consecuencias del trastorno de conducta pueden ser graves y duraderas. Los individuos con DC tienen un mayor riesgo de fracaso académico, abuso de sustancias, problemas legales y dificultades en las relaciones. Sin tratamiento, el DC puede evolucionar hacia trastornos mentales más graves, como el trastorno antisocial de la personalidad del adulto (ASPD).

Diferencia del trastorno de conducta del trastorno negativista desafiante y del trastorno antisocial de la personalidad

El trastorno de conducta es distinto del trastorno negativista desafiante (TOD) y del trastorno antisocial de la personalidad (TAPS), aunque comparten algunas similitudes. El TOD se caracteriza por un patrón de comportamiento airado y desafiante, pero no implica la violación de los derechos básicos de los demás en la medida que se observa en el TC.

Por otro lado, el ASPD es una forma más grave de DC que persiste en la edad adulta, con un patrón más amplio de desprecio y violación de los derechos de los demás. De hecho, el ASPD es el único trastorno de la personalidad del DSM que requiere que la persona haya sido diagnosticada previamente de DC.

Comprender los matices de estos trastornos es crucial para un diagnóstico preciso y un tratamiento eficaz.

Criterios DSM 5 para el trastorno de conducta

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¿Cómo diagnostican los profesionales de la salud el trastorno de conducta?

Para diagnosticar un trastorno de conducta, los profesionales de la salud realizan una evaluación exhaustiva que incluye:

  1. Entrevista clínica: Una entrevista detallada con el niño, los padres y los profesores para recabar información sobre el comportamiento del niño, los antecedentes familiares y cualquier factor ambiental que pueda contribuir al trastorno.
  2. Observación: Observación del comportamiento del niño en diferentes entornos, como el hogar, la escuela o durante la entrevista clínica, para identificar patrones de problemas de conducta y evaluar el funcionamiento interpersonal y emocional.
  3. Pruebas psicológicas: Administración de pruebas estandarizadas para evaluar el funcionamiento emocional, conductual y cognitivo del niño, así como cualquier enfermedad mental concurrente.
  4. Evaluación médica: Un examen físico para descartar cualquier afección médica que contribuya al comportamiento del niño.
  5. Revisión de los registros: Examen de los registros escolares, el historial médico y cualquier evaluación psicológica previa para recopilar información adicional sobre el comportamiento y el desarrollo del niño.

Combinando la información de estas evaluaciones, los profesionales de la salud pueden determinar si el niño cumple los criterios del DSM-5 para el trastorno de conducta y desarrollar un plan de tratamiento adecuado al tiempo que se tiene en cuenta la presencia de afecciones concurrentes como el trastorno bipolar.

¿Qué es el DSM 5?

El Manual diagnóstico y estadístico de los trastornos mentales, quinta edición (DSM-5), es un sistema exhaustivo de clasificación de los trastornos mentales. Está publicado por la Asociación Americana de Psiquiatría (APA) y es ampliamente utilizado por los profesionales de la salud mental en Estados Unidos y en todo el mundo.

El DSM-5 sirve como estándar para el diagnóstico de los trastornos mentales y proporciona criterios estandarizados para garantizar la coherencia y la precisión en el diagnóstico. El manual abarca una amplia gama de afecciones mentales, incluidos los trastornos del estado de ánimo, los trastornos de ansiedad, los trastornos de la personalidad y otros. El DSM-5 se actualiza periódicamente para reflejar los avances en nuestra comprensión de la salud mental e incorporar los últimos hallazgos de la investigación.

Criterios del DSM para el trastorno de conducta

Los criterios del DSM para el trastorno de conducta describen los comportamientos y patrones específicos que caracterizan al trastorno. Para ser diagnosticada de trastorno de conducta, una persona debe mostrar un patrón persistente de comportamiento que viole los derechos de los demás o las principales normas o reglas sociales apropiadas para su edad. Esencialmente, estos son los síntomas del trastorno de conducta.

Según el DSM-5, los criterios del trastorno de conducta incluyen los siguientes:

  1. Agresión a personas y animales:
  • A menudo acosa, amenaza o intimida a los demás.
  • A menudo inicia peleas físicas.
  • Ha utilizado un arma que puede causar daños físicos graves a los demás (por ejemplo, un bate, un ladrillo, una botella rota, un cuchillo, una pistola).
  • Ha sido físicamente cruel con las personas.
  • Ha sido físicamente cruel con los animales.
  • Ha robado mientras se enfrentaba a una víctima (por ejemplo, atraco, robo de bolso, extorsión, robo a mano armada).
  • Ha forzado a alguien a mantener relaciones sexuales.
  1. Destrucción de la propiedad:
  • Ha provocado deliberadamente un incendio con la intención de causar daños graves.
  • Ha destruido deliberadamente la propiedad de otros (que no sea prendiendo fuego).
  1. Engaño o robo:
  • Ha irrumpido en la casa, el edificio o el coche de otra persona.
  • Miente a menudo para obtener bienes o favores o para eludir obligaciones (es decir, "estafa" a otros).
  • Ha robado objetos de valor no trivial sin enfrentarse a la víctima (por ejemplo, hurto en tiendas, pero sin allanamiento de morada; falsificación).
  1. Violaciones graves de las normas:
  • A menudo permanece fuera de casa por la noche a pesar de las prohibiciones de los padres, desde antes de los 13 años.
  • Se ha escapado de casa por la noche al menos dos veces mientras vivía en el hogar paterno o sustituto (o una vez sin regresar durante un periodo prolongado).
  • Falta con frecuencia a la escuela, desde antes de los 13 años.

La presencia de al menos tres de estos criterios en los últimos 12 meses, con al menos un criterio presente en los últimos seis meses, es necesaria para el diagnóstico de trastorno de conducta. La gravedad del trastorno de conducta puede clasificarse como leve, moderada o grave en función del número y la gravedad de los comportamientos exhibidos.

Diferencias entre los criterios del trastorno de conducta del DSM 4 y del DSM 5

Las diferencias entre los criterios del trastorno de conducta del DSM-4 y del DSM-5 son relativamente menores, pero existen. El DSM-5, publicado en 2013, pretendía ofrecer criterios más claros y precisos y reflejar las últimas investigaciones de campo.

Estas son algunas de las diferencias clave entre los criterios del DSM-4 y el DSM-5 para el trastorno de conducta:

  1. Clasificación del trastorno: El DSM-4 clasificaba el trastorno de conducta en "Trastornos por déficit de atención y comportamiento perturbador", pero en el DSM-5 se ha reclasificado en "Trastornos perturbadores, del control de los impulsos y de la conducta".
  2. Introducción del especificador: El DSM-5 introdujo un nuevo especificador, "Con emociones prosociales limitadas", para describir a los individuos que muestran al menos dos de los siguientes rasgos de forma persistente durante al menos 12 meses y en múltiples relaciones y entornos: falta de remordimiento o culpa, insensible falta de empatía, despreocupación por el rendimiento y afecto superficial o deficiente.
  3. Especificador de gravedad: El DSM-5 añadió un especificador de gravedad (leve, moderado, grave) basado en el número de problemas de conducta, su impacto en los demás y el daño causado.

Estos cambios tenían como objetivo proporcionar descripciones más detalladas y precisas de los individuos con Trastorno de Conducta, permitiendo un mejor diagnóstico y planificación del tratamiento.

Tratamiento del trastorno de conducta

Para abordar eficazmente el trastorno de conducta, es esencial un plan de tratamiento integral. He aquí algunos componentes clave del tratamiento del Trastorno de Conducta:

  • Terapia cognitivo-conductual (TCC): La TCC ayuda a los niños y adolescentes a identificar y cambiar los patrones de pensamiento y los comportamientos negativos. Puede mejorar las habilidades de resolución de problemas, el control de la ira y el control de los impulsos.
  • Programas de formación para padres: Estos programas educan a los padres en técnicas de crianza eficaces, como establecer límites claros, utilizar una disciplina coherente y reforzar los comportamientos positivos.
  • Terapia familiar: La terapia familiar puede abordar problemas de comunicación y resolución de conflictos y mejorar la dinámica familiar en general, lo que puede ser crucial para controlar el trastorno de conducta.
  • Medicación: Aunque no existen medicamentos específicos para el trastorno de conducta, pueden recetarse ciertos medicamentos para tratar afecciones concurrentes como el TDAH, la depresión o la ansiedad.
  • Terapia de grupo: La terapia de grupo puede proporcionar un entorno de apoyo para que los niños y adolescentes aprendan habilidades sociales, empatía y cómo interactuar positivamente con sus compañeros.

Es importante señalar que la intervención precoz y un enfoque adaptado al tratamiento son cruciales para controlar eficazmente el trastorno de conducta y prevenir sus consecuencias a largo plazo.

Investigación sobre el trastorno de conducta

El estudio del Trastorno de Conducta (TC) ha avanzado mucho en los últimos años, arrojando luz sobre su compleja naturaleza. Investigaciones pioneras proporcionan una comprensión más profunda del trastorno, allanando el camino para intervenciones más eficaces.

Uno de esos estudios, realizado por Pardini y Frick (2013), exploró las múltiples vías de desarrollo a través de las cuales los niños y adolescentes pueden desarrollar una tendencia hacia el trastorno de conducta. La revisión esbozó tres vías etiológicas distintas basadas en la edad de inicio del comportamiento antisocial, la presencia de rasgos callosos-no emocionales y problemas con la regulación de la ira.

Otro estudio significativo realizado por Staginnus et al. (2023) en la Universidad de Bath, Reino Unido, investigó las diferencias estructurales cerebrales en niños con trastorno de conducta que habían sufrido maltrato en la infancia. Revelaron que los jóvenes maltratados con TC presentaban cambios más extensos en la estructura cerebral en comparación con los jóvenes no maltratados con TC y los controles sanos.

Estos estudios destacan la importancia de tener en cuenta las diferencias individuales y los factores ambientales a la hora de comprender y tratar el trastorno de conducta. A medida que evolucione la investigación, promete intervenciones más específicas y eficaces para los afectados por este desafiante trastorno.

Referencias

Elmaghraby, R., & Garayalde, S. (2021, septiembre). ¿Qué son los trastornos disruptivos, de control de impulsos y de conducta? Psychiatry.org. https://www.psychiatry.org/patients-families/disruptive-impulse-control-and-conduct-disorders/what-are-disruptive-impulse-control-and-conduct

Pardini, D., & Frick, P. J. (2013). Múltiples vías de desarrollo hacia el trastorno de conducta: Conceptualizaciones actuales e implicaciones clínicas. Journal of the Canadian Academy of Child and Adolescent Psychiatry, 22(1), 20-25. https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC3565711/

Searight, H. R., Rottnek, F., & Abby, S. L. (2001). Trastorno de conducta: Diagnóstico y tratamiento en atención primaria. American Family Médico, 63(8), 1579-1589. https://www. aafp.org/pubs/afp/issues/2001/0415/p1579.html

Staginnus, M., Cornwell, H., Toschi, N., Oosterling, M., Paradysz, M., Smaragdi, A., González-Madruga, K., Pauli, R., Rogers, J. C., Bernhard, A., Martinelli, A., Kohls, G., Raschle, N. M., Konrad, K., Stadler, C., Freitag, C. M., De Brito, S. A., & Fairchild, G. (2023). Probando el modelo del ecofenotipo: Alteraciones de la estructura cortical en el trastorno de conducta con y sin maltrato infantil. Psiquiatría Biológica: Neurociencia cognitiva y neuroimagen, 8(6), 609-619. https://doi.org/10.1016/j.bpsc.2022.12.012

Administración de Servicios de Abuso de Sustancias y Salud Mental. (2016, junio). Tabla 17, Comparación del DSM-IV con el DSM-5 sobre trastornos de conducta. PubMed; Administración de Servicios de Salud Mental y Abuso de Sustancias (EE. UU.). https://www.ncbi.nlm.nih.gov/books/NBK519712/table/ch3.t13/

¿Cuáles son los criterios del trastorno de conducta?
¿Cuáles son los criterios del trastorno de conducta?

Preguntas Frecuentes

¿Cuáles son los criterios del trastorno de conducta?

Los criterios para el trastorno de conducta incluyen un patrón repetitivo y persistente de comportamiento que viola los derechos básicos de los demás o las principales normas o reglas sociales apropiadas para la edad, con al menos tres de los criterios especificados presentes en los últimos 12 meses.

¿Cuál es el código DSM-5 para el trastorno de conducta?

El código del DSM-5 para el trastorno de conducta es 312.81 para el de inicio en la infancia, 312.82 para el de inicio en la adolescencia y 312.89 para el de inicio no especificado.

¿Es lo mismo el trastorno de conducta y el ASPD?

No, el trastorno de conducta y el trastorno antisocial de la personalidad (TAP) no son lo mismo. El trastorno de conducta se diagnostica en niños y adolescentes, mientras que el ASPD se diagnostica en adultos. Sin embargo, los individuos con trastorno de conducta tienen un mayor riesgo de desarrollar ASPD en la edad adulta.

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