Prueba de fatiga por compasión
Compruebe su nivel de fatiga por compasión con la descarga gratuita en PDF de Carepatron de un test y un ejemplo de fatiga por compasión. Comprenda los signos y síntomas.
¿Qué es la fatiga por compasión?
La fatiga por compasión es una afección que experimentan los cuidadores y los profesionales de la salud, caracterizada por el agotamiento emocional y la disminución de la capacidad de empatizar con los pacientes. Surge de la exposición prolongada al sufrimiento ajeno, que a menudo conduce a un estrés traumático secundario (Figley, 1995). A diferencia del agotamiento, que se desarrolla con el tiempo debido al estrés laboral, la fatiga por compasión puede surgir de forma repentina e intensa como respuesta a un trauma secundario o a una exposición secundaria a acontecimientos traumáticos.
Los profesionales que experimentan fatiga por compasión pueden mostrar signos de advertencia como irritabilidad, sentimientos negativos hacia su trabajo y una disminución de la satisfacción por compasión, es decir, el placer derivado de ayudar a los demás. Estos síntomas pueden repercutir significativamente en la calidad de vida del profesional, afectando a su capacidad para proporcionar una atención de alta calidad profesional.
La medida más utilizada para evaluar la fatiga por compasión es la Escala de calidad de vida profesional, que incluye un autotest de fatiga por compasión. Esta herramienta ayuda a identificar tanto los efectos positivos como los negativos de los cuidados, ofreciendo una visión del equilibrio entre la satisfacción por compasión y los riesgos de estrés traumático secundario.
Reconocer y abordar la fatiga por compasión es crucial para mantener el bienestar de los cuidadores. Las estrategias de autocuidado, incluida la búsqueda de apoyo de otros cuidadores y la participación en el proceso de sanación, pueden mitigar su impacto.
Prueba de fatiga por compasión
Prueba de fatiga por compasión | Ejemplo
¿Qué es la prueba de la fatiga por compasión?
El Test de la fatiga por compasión es una herramienta de evaluación diseñada para medir el nivel de fatiga por compasión en cuidadores y profesionales de la salud. La prueba mide factores clave como la empatía, el trauma secundario y la satisfacción, proporcionando una visión global de su calidad de vida profesional.
La prueba ayuda a identificar síntomas de agotamiento emocional, estrés traumático secundario y disminución de la satisfacción por compasión. Se trata de una herramienta para reconocer los primeros signos de alerta y poner en práctica estrategias de autocuidado para mitigar el impacto del trauma secundario, garantizando en última instancia que los cuidadores puedan mantener su bienestar y seguir prestando cuidados de alta calidad.
¿Cómo se puntúa?
El Test de Fatiga por Compasión , desarrollado por Figley (1995), es un instrumento ampliamente utilizado para medir la fatiga por compasión y el agotamiento laboral.
El CFST consta de 40 ítems divididos en dos subescalas: 23 ítems para la fatiga por compasión y 17 ítems para el agotamiento. Los encuestados puntúan con qué frecuencia se les aplica cada característica en una escala del 1 (rara vez/nunca) al 5 (muy a menudo).
Las puntuaciones en la subescala de fatiga por compasión oscilan entre 26 o menos (riesgo extremadamente bajo) y 41 o más (riesgo extremadamente alto). En cuanto al agotamiento, las puntuaciones oscilan entre 36 o menos (riesgo extremadamente bajo) y 76 o más (riesgo extremadamente alto).
Próximos pasos después de realizar/tomar esta prueba
Después de realizar la prueba de fatiga por compasión, es importante interpretar sus resultados y tomar las medidas adecuadas en función de su nivel de riesgo. Si obtiene una puntuación en las categorías de riesgo moderado a alto de fatiga por compasión o agotamiento, considere la posibilidad de buscar el apoyo de un profesional de la salud mental o de un grupo de apoyo. Poner en práctica estrategias de autocuidado, como el ejercicio regular, las prácticas de atención plena y el establecimiento de límites, puede ayudar a mitigar los síntomas. Entable conversaciones abiertas con colegas o supervisores sobre su carga de trabajo y su bienestar emocional. Reevaluar periódicamente sus niveles de fatiga por compasión también puede ayudarle a controlar su progreso y a asegurarse de que mantiene una calidad de vida profesional saludable.
Cómo utilizar nuestra plantilla del test de fatiga por compasión
La plantilla del test de fatiga por compasión de Carepatron está diseñada para ayudar a los profesionales médicos a evaluar su riesgo de fatiga por compasión y agotamiento. A continuación le explicamos cómo utilizar la plantilla del test de fatiga por compasión de Carepatron:
Paso 1: Acceder a la plantilla
Comience por acceder a la plantilla del Test de fatiga por compasión de Carepatron en nuestra Biblioteca de recursos. Esta herramienta de escala vital está desarrollada para medir la fatiga por compasión y el agotamiento mediante subescalas para cada uno.
Paso 2: Complete la evaluación
Responda a cada ítem basándose en sus sentimientos y experiencias recientes. La prueba incluye ítems relacionados con la empatía, el sufrimiento, el trauma y la satisfacción. Valore la frecuencia con la que experimenta cada sentimiento, desde rara vez hasta muy a menudo.
Paso 3: Interprete sus puntuaciones
Tras completar la prueba, revise sus puntuaciones en las subescalas de fatiga por compasión y agotamiento. Las puntuaciones altas indican una mayor probabilidad de sufrir fatiga por compasión o agotamiento. Comprender estas puntuaciones puede ayudarle a concienciarse sobre su calidad de vida profesional y el equilibrio entre el trabajo y el bienestar personal.
Paso 4: Reflexione y actúe
Si tiene puntuaciones altas, es importante que tome medidas para abordar estos problemas. Busque el apoyo de otros cuidadores, utilice los recursos disponibles y desarrolle estrategias de autocuidado para recuperar su energía y reducir los sentimientos de desesperanza.
Utilice regularmente la plantilla del Test de Fatiga por Compasión para ayudarle a mantener un equilibrio saludable y mejorar su calidad de vida con el tiempo.
Cómo se benefician de ella los profesionales de la salud mental
Los profesionales de la salud mental pueden obtener importantes beneficios de la utilización del test de fatiga por compasión en su consultorio.
Detección precoz
La utilización del Test de Fatiga por Compasión permite a los profesionales de la salud mental identificar en sí mismos los primeros signos de fatiga por compasión y agotamiento. La detección precoz permite intervenir a tiempo y aplicar estrategias preventivas para mantener su bienestar.
Planificación personalizada del tratamiento
Al evaluar sus niveles de fatiga por compasión, los profesionales de la salud mental pueden adaptar los planes de tratamiento para sus clientes con mayor eficacia. Comprender sus propios estados emocionales y mentales les ayuda a mantener la empatía y evitar la fatiga por compasión, garantizando que puedan proporcionar una atención óptima a sus clientes.
Crecimiento y desarrollo profesional
Los profesionales de la salud mental pueden reflexionar sobre sus resultados, identificar áreas de mejora y emprender prácticas de autocuidado que mejoren su capacidad de recuperación y su satisfacción laboral. Este enfoque proactivo fomenta un equilibrio más saludable entre la vida laboral y personal y favorece la longevidad profesional a largo plazo en el campo de la atención a la salud mental.
Referencia
Figley, C. R. (Ed.). (1995). Fatiga por compasión: Cómo afrontar el trastorno de estrés traumático secundario en quienes tratan a los traumatizados. https://psycnet.apa.org/record/1995-97891-000
Preguntas Frecuentes
El autotest de fatiga por compasión es una herramienta de evaluación utilizada para medir el riesgo de fatiga por compasión y agotamiento entre cuidadores y profesionales de la salud.
Entre los signos de la fatiga por compasión se incluyen el agotamiento emocional, la disminución de la empatía hacia los pacientes y los sentimientos de desesperanza o irritabilidad.
No existe una cura única para la fatiga por compasión, pero entre los tratamientos eficaces se incluyen las prácticas de autocuidado, la búsqueda de apoyo de compañeros y supervisores y el mantenimiento de un equilibrio saludable entre la vida laboral y personal.