Prueba de dedo de fortin
Descubra las ventajas de la prueba del dedo de Fortin para detectar disfunciones de la articulación sacroilíaca. Aprenda a utilizar nuestra Plantilla para un diagnóstico preciso y una atención eficaz al paciente.
¿Qué es la disfunción de la articulación sacroilíaca?
La disfunción de la articulación sacroilíaca es una dolencia que afecta a la articulación sacroilíaca (SI), que conecta el sacro (el hueso triangular de la parte inferior de la columna vertebral) con la pelvis. Esta articulación puede convertirse en una fuente de dolor debido a diversos factores, como lesiones, inflamación o degeneración. Las anomalías de la articulación sacroilíaca también pueden contribuir al dolor en esta zona. Comprender las causas y los síntomas es crucial para un diagnóstico y un tratamiento eficaces.
Causas de la disfunción de la articulación sacroilíaca
Son varios los factores que pueden provocar una disfunción de la articulación sacroilíaca. Algunas de las causas más comunes son
- Traumatismo o lesión de la articulación sacroilíaca
- Artritis o degeneración de la articulación SI
- Embarazo y parto, que pueden provocar cambios en la pelvis
- Inflamación debida a afecciones como la espondilitis anquilosante
- Marcha anormal o patrones de movimiento que sobrecargan la articulación sacroilíaca
Síntomas de la disfunción de la articulación sacroilíaca
Los síntomas de la disfunción de la articulación sacroilíaca pueden variar, pero suelen incluir:
- Dolor localizado en la zona lumbar y las nalgas
- Dolor alrededor de la espina ilíaca posterosuperior
- Dolor que se irradia a la parte superior del muslo o la ingle
- Rigidez y reducción de la amplitud de movimiento en la zona lumbar
- Aumento del dolor al levantarse desde una posición sentada o al permanecer de pie durante mucho tiempo
- Molestias al subir escaleras o al correr
Prueba de dedo de fortin
Prueba de dedo de fortin | Ejemplo
Cómo detectar y diagnosticar el dolor de la articulación sacroilíaca
Detectar y diagnosticar el dolor y la disfunción de la articulación sacroilíaca implica una combinación de evaluación clínica y pruebas diagnósticas. Profesionales de la salud comienzan por elaborar el historial médico del paciente, y un médico especialista en dolor realiza un examen físico, buscando sensibilidad sobre la articulación sacroilíaca y evaluando la amplitud de movimiento. A continuación, utilizan ayudas diagnósticas fiables como la prueba del dedo de Fortin, que es esencial en este proceso.
Además, pruebas de provocación como la prueba de prueba de flexión, abducción y rotación externa (FABER) y Prueba de Gaenslen pueden utilizarse para localizar el origen del dolor en la articulación SI. Estas pruebas pueden realizarse para excluir otros posibles focos de dolor, como los focos de dolor de la articulación posterior y los generadores de dolor de la articulación cigapofisaria, durante la evaluación. Además, también pueden utilizarse estudios de imagen como radiografías, resonancias magnéticas o tomografías computarizadas para descartar otras causas de dolor lumbar y proporcionar imágenes detalladas de la articulación SI.
En algunos casos, las inyecciones diagnósticas de un anestésico local en la región dolorosa de la articulación SI confirman el diagnóstico si el dolor lumbar del paciente se alivia temporalmente. También se utilizan inyecciones en la articulación sacroilíaca para validar los hallazgos positivos de anomalías de la articulación sacroilíaca.
¿Qué es la prueba del dedo de Fortin?
La prueba del dedo de Fortin es una evaluación clínica para detectar la disfunción de la articulación sacroilíaca. Ayuda a identificar el dolor originado en la articulación sacroilíaca, a menudo asociado al dolor lumbar y de las extremidades inferiores. Durante la prueba, se pide al paciente que utilice un dedo para localizar la zona de dolor. El examinador anota la localización y deja que el paciente se relaje. Transcurridos entre cinco y diez minutos, el examinador pide al paciente que vuelva a identificar el lugar donde siente más dolor.
Una prueba positiva se indica cuando el paciente identifica la región dolorosa como la zona inferomedial a la espina ilíaca posterosuperior (PSIS) dentro de 1 cm en dos ocasiones distintas. Esta localización constante del dolor sugiere una disfunción de la articulación sacroilíaca (Fortin y Falco, 1997).
¿Cómo utilizar la plantilla de la prueba del dedo de Fortin?
La plantilla de la prueba del dedo de Fortin está diseñada para ayudar a los Profesionales de la salud a evaluar con precisión la disfunción de la articulación sacroilíaca en los pacientes. Siga estos pasos para utilizar la plantilla con eficacia:
Paso 1: Descargue y prepare la plantilla
Comience descargando la plantilla de la prueba del dedo Fortin de nuestro sitio web. Imprima una copia para cada paciente que tenga previsto evaluar. Familiarícese con la estructura y las secciones de la plantilla para garantizar un proceso de prueba sin problemas.
Paso 2: Registre la información del paciente
Rellene la sección de información del paciente, incluyendo su nombre, fecha de nacimiento, sexo, fecha de la prueba, altura y peso. Los detalles precisos del paciente son cruciales para realizar un seguimiento eficaz de los diagnósticos diferenciales y gestionar su estado.
Paso 3: Explicar la finalidad y el procedimiento
Explique claramente al paciente la finalidad de la prueba del dedo de Fortin. Infórmele de que la prueba ayuda a detectar la disfunción de la articulación sacroilíaca y guíele por los pasos que deberá seguir durante la prueba. Esta preparación ayuda a ganarse su cooperación y a garantizar unos resultados precisos.
Paso 4: Realice la prueba y registre los resultados
Utilice las instrucciones incluidas en la Plantilla para realizar la prueba. Registre después sus respuestas y cualquier observación en la sección de resultados de la plantilla.
Paso 5: Interprete los resultados y planifique los siguientes pasos
Interprete los resultados en función de la coherencia y la sensibilidad de la paciente para identificar la zona dolorida. Utilice los indicadores proporcionados en la plantilla para determinar si la articulación sacroilíaca es la fuente probable de dolor. Documente sus hallazgos y comente los siguientes pasos con el paciente, incluidas otras pruebas diagnósticas o un plan de tratamiento.
Ventajas de utilizar nuestra Plantilla
El uso de nuestra plantilla para la prueba del dedo de Fortin ofrece varias ventajas a los profesionales de la salud:
Documentación estandarizada
Nuestra plantilla recoge de forma coherente toda la información necesaria, lo que favorece la precisión y la exhaustividad de los historiales de los pacientes. Esta estandarización ayuda a mantener una documentación de alta calidad que puede revisarse y referenciarse rápidamente.
Eficiencia en el tiempo
Los Profesionales de la salud pueden realizar y registrar de forma rápida y eficaz la prueba del dedo Fortin para pacientes siguiendo un formato estructurado. Esta eficiencia permite disponer de más tiempo para centrarse en la atención al paciente y otras tareas críticas.
Mayor precisión diagnóstica
La Plantilla guía a los profesionales a través de cada paso del diagnóstico diferencial, garantizando que no se pase por alto ningún elemento crítico. Esta minuciosidad mejora la probabilidad de diagnosticar con precisión la disfunción de la articulación sacroilíaca, lo que se traduce en mejores resultados para los pacientes.
Referencia
Fortin, J. D., & Falco, F. J. (1997). La prueba del dedo de Fortin: Un indicador del dolor sacroilíaco. American Journal of Orthopedics (Belle Mead, N.J.), 26(7), 477-480. https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/9247654/
Preguntas Frecuentes
La prueba del dedo de Fortin detecta el dolor y la disfunción de la articulación sacroilíaca haciendo que el paciente indique el dolor y la zona de la articulación sacroilíaca con un dedo.
El paciente apunta con un dedo a la zona del dolor dos veces, y si el dolor se localiza a menos de 1 cm del mismo punto cada vez, la prueba se considera positiva.
Entre los síntomas más comunes se incluyen dolor lumbar, dolor en las nalgas y molestias y presión que se irradian a las piernas.